El mito de los deberes. Una aportación al debate educativo

El enorme crecimiento que los deberes están teniendo en nuestro país sucede en paralelo a la extensión de las políticas educativas que vienen desde Estados Unidos con la retórica del esfuerzo, la exigencia, las pruebas externas o revalidas, el control y la competitividad entre niños y centros educativos.

Una globalización educativa que en España refuerza la visión más tradicional y antigua sobre la educación perjudicando el aprendizaje y el desarrollo de nuestros hijos e hijas y que tienen un claro efecto cada tarde en nuestras casas: cada vez más deberes y cada vez antes.
El debate está en la calle, padres y madres vemos como nuestros hijos hacen muchos más deberes de los que hacíamos nosotros en nuestros días de escuela, y cada vez desde más pronto, en una doble jornada que ocupa las tardes y los fines de semana de los niños y niñas desde primero de primaria y, a veces antes.

Un mal generalizado que aceptamos con impotencia sin sentir que podamos hacer nada, más que quejarnos y ver como nuestros hijos hacen frente a jornadas interminables de las 9 de la mañana a las 9 de la noche. Por norma.

La huelga de familias llevada a cabo en Francia el pasado año llevó el debate a los medios de comunicación, y hoy es un tema frecuente en artículos en periódicos y revistas, así como de comentarios en programas de radio.

El mito de los deberes pretende ser una herramienta en este debate educativo y social. Su brillante análisis no solo pone al descubierto el sinsentido de los deberes, sino también las fuertes conexiones entre estos y una visión de la educación gravemente equivocada en su concepción del aprendizaje.

Proporciona argumentos que nos ayudarán a fundamentar lo que intuimos, y a participar activamente en la defensa de la educación y la vida de nuestros hijos.

Madres y padres, también profesoras y profesores, tenemos "deberes": leer el El mito de los deberes.